Santorini es un archipiélago formado por un conjunto de islas, al sur del mar Egeo. Opino que la mejor manera de llegar es en ferry, y así poder contemplar la enorme bahía, prácticamente cerrada, de unos 10 kilómetros de diámetro.
El azul oscuro del mar contrasta con los colores de las piedras volcánicas de los acantilados, que oscilan entre 150 y 300m de altura, culminado por las construcciones de color blanco. Esta curiosa forma de la isla, es debida a una enorme explosión volcánica que hizo desaparecer gran parte del territorio original y provocó la creación de la caldera geológica actual.
Personalmente de todos los lugares de “sol y playa” en los que he estado, creo que las islas griegas es uno de los mejores. Dada la cercanía a nuestro país y su carácter mediterráneo, bien vale pasarse por allí en algún momento; mejor en Junio o Septiembre, porque estará menos masificado. De todas formas es inevitable encontrase con mucho turismo, allí hacen escala multitud de cruceros. Si lo que buscáis son playas de arenas finas y blancas, este no es el sitio. Si por el contrario lo que queréis son pequeñas calas o playas de gruesa arena, incluso guijarros, entonces sí. Las hay tranquilas o con marcha; de arenas blancas, negras o incluso rojizas; con todos los servicios y comodidades o casi inaccesibles.
Pero no todo es playa, hay dos visitas, al menos, que son indispensables.